Muchas pero muchas horas estuvimos en este tren, había llovido muchisimo y el tren tuvo que parar infinidad de veces, porque en china parece ser que no tienen la costumbre de cortar los servicios de transporte por tierra ante cualquier "contratiempo", ya sabréis mas adelante porqué digo esto, el caso es que pasamos muchisimas horas en este tren, que nos llevaba a Chendu que tiene una reserva de osos Panda y la mejor salida de ruta hacia Jiuzhaigou. Esto sí que es para que no os lo perdáis....fue una odisea.
Pero estamos todavía en este tren y en el mogollón de horas que pasamos, no encontramos a gente demasiado dispuesta a charlar, no llevábamos comida de nuestro agrado( solíamos comprarla en supermercados) y calculamos muy mal el tiempo de estar en el tren, la de los andenes del tren no nos gustaba, la del carrito que pasa por los pasillos, olia de pena, resultado:
Hambre canina, mal humor y mal rollito.
Pero por fin llegamos: Chendu...deseado Chendu...¿Que nos deparas?